lunes, 24 de marzo de 2008

Niña de diez años...


Karina vivía en un residencial lujoso. Tenía todo lo que una niña de su edad desearía. Sus padres eran profesionales: su madre, una doctora; su padre, un arquitecto y un ingeniero. Eran los mejores del mundo, ella era su adoración. Siempre fue muy feliz.

Tenía una amiga. Juntas cometían muchas travesuras, algunas de las cuales sus padres poco entendían.

-Contigo me divierto mucho -dijo Karina. Su amiguita sonrió extrañamente.

En su colegio, Karina fue una la más popular. Todos querían sentarse, andar, comer, jugar con ella. Sin embargo, esto le incomodaba, porque ella no sentía “especial”, sólo era una niña normal.

-Amanda -dijo a su amiga-, contigo me siento segura. ¿Quieres que juegue con mis padres? ¿De qué manera? ¡Pero así no quiero jugar con ellos! Sí, quiero que sigas siendo mi amiga. Lo haré…

Una noche, sus padres la metieron en la cama y le dieron un beso en su frente. A la mañana siguiente, en el periódico local se publicó en primera plana: Niña de diez años degüella a sus padres mientras duermen.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Los sueños de Amanda son los míos los tuyos...son cadenas de aire acumuladas ensus mejillas....son blasfemias que llegan de lejos...los sueños de Amanda son los mios los tuyos....